Exposición del Prof. José Luis Exeni Rodríguez * en el Conversatorio sobre Justicia Indígena y Plurinacionalidad ** organizado por la Fundación Rosa Luxemburgo y el Instituto de Altos Estudios Nacionales de Ecuador, 2011
Algunas consideraciones respecto a la relación entre Justicia Indígena y Plurinacionalidad en el caso boliviano.
Audio y notas de desgrabación

El estudio, en el caso de Bolivia se remonta y tiene vinculación directa con el proceso constituyente, un proceso constituyente cuyo origen es una demanda de los pueblos indígenas de Tierras bajas –en esa ya histórica Marcha por la Dignidad y el Territorio de 1990– y tenemos 20 años de proceso constituyente en que primero aparece la demanda de una asamblea constituyente para refundar el país; luego esta demanda se convierte en plataforma político-electoral, en 2002; adquiere rango de agenda luego de la guerra del gas, en octubre de 2003; se convierte en parte de un programa de gobierno con la victoria de Evo Morales en 2005; finalmente, en 2006 con la elección por voto popular de 255 constituyentes da lugar a la conformación por primera vez en nuestra historia de una asamblea
constituyente que durante 18 meses hasta diciembre de 2007 genera un nuevo texto constitucional, aprobado posteriormente en referéndum.
Este proceso forma parte de un nuevo impulso que tiene que ver con la idea de un constitucionalismo transformador, constitucionalismo de emancipación desde abajo en el que ha habido una centralidad no sólo en términos de demanda, de presencia, sino proposiviva del llamado pacto de unidad en Bolivia que aglutina las principales organizaciones indígena-originario-campesinas.
Entonces a partir de esto se da proceso de refundación del estado, un proceso de construcción del estado plurinacional en el marco de un nuevo modelo de estado que sin dejar de ser unitario aspira al mismo tiempo a ser comunitario, intercultural, plurinacional y con autonomías. Ese es el tamaño del desafío y por supuesto hay importantes e interesantes avances, como hay complicados y difíciles límites y retrocesos.
El dato importante es que estamos actualmente ante este proceso de construcción que se ha denominado ESTADO HIPERCOMPLEJO, que tiene que ver con cómo interpelamos la idea de estado-nación –esto que durante todo el proceso de construcción estatal en Bolivia durante el siglo XIX y el siglo XX durante toda la república se configuró como un estado monocultural, un estado colonial, como un estado homogéneo institucionalmente–, cómo se da el salto al reconocimiento de que en un solo estado, en un mismo estado puede coexistir y convivir dos concepciones de nación: una nación cívica, la Nación Boliviana, y diferentes naciones culturales que se expresan en el reconocimiento ahora sí constitucional, de que la Nación Boliviana está configurada por todos los
bolivianos y bolivianas, por las comunidades interculturales afrobolivianas, y en especial por las 36 naciones y pueblos indígenas originario-campesinas que son reconocidas en la Constitución.